viernes, marzo 21, 2014

Ejemplo histórico de cómo un interés común disfraza ambiciones individuales






Comentario a intercambio de opiniones entre Sergio Villalobos y FranciscoHuenchumilla.


Señor Villalobos
 

Casos históricos en que se buscaron argumentos llamados de “interés común” para esconder una ambición individual, sobran. Guerras santas, étnicas, nacionalistas  y en realidad guerras de todo tipo tienen en la historia esta doble o múltiple interpretación.

Puedo así creer perfectamente posible que  “una aristocracia deseosa de enriquecerse” encontró en el motivo de que existía “una gran demanda mundial de alimentos”, un pretexto ideal para hacer “inaceptable” que hubiese tierras desperdiciadas en manos de los naturales de La Araucanía, y  así dentro de esa lógica, era justificado y necesario explotar hasta el último rincón de Chile. Como dice el cliché: "La historia es escrita por los vencedores"

El “avance” más allá del Biobío que usted  indica, en este caso de la clase media y gente del bajo pueblo, siempre lo hacen los peones inducidos por el rey.

La “manera” de hacerlo, obviamente se intenta con el menor efecto colateral posible, pero podemos acordar que la “pacificación” no fue precisamente pacifica.  

En el fondo, las tierras pasarían de un señor que no las explotaba, a manos de señores que si la explotarían y de paso explotarían mestizos y peones para lograrlo, avalados por la escasez alimentaria existente. Una nación moderna, en manos de una elite latifundista, no podía aceptar esa situación de flojos. El futuro de su Chile debía ser distinto.

Me gustaría ver un comentario de Gabriel Salazar acerca de esto.  

Don Sergio, su concepto de “abuso de la conciencia de las posibilidades” me parece genial, pero en este caso considero un poco main-stream su planteamiento.  Hablar también de hombres borrachos y mujeres sometidas, es bastante reduccionista también, para argumentar la necesidad de un granjero canuto, abstemio y devoto a su mujer.

Sin entrar en analizar descalificaciones personales, su descalificación liviana al hombre mapuche, me parece grave.  La modernidad y occidente en pos del progreso administrado por una elite, ha afectado al resto del mundo de maneras insospechadas, que merecen un tratamiento mucho más delicado que su antítesis mapuche a la tesis del hombre trabajador.

Volviendo al principio, creo sin duda, que este hombre de trabajo, aparentemente movido por la libertad de surgir y vivir, es empujado por otras fuerzas a los cuales sirve, un interés cupular que usted prefiere desconocer.   


 


0 comentarios:

Template Designed by Douglas Bowman - Updated to Beta by: Blogger Team
Modified for 3-Column Layout by Hoctro