Como un perro bestia, el muy rata dejo pal gato al pobre
pájaro, bien sapo y ganso que loreó la mula caballa que se tiró la yegua,
cotorreando que el potro jote pica flor y la zorra gata mosquita muerta, lo
pasaron chancho a espaldas del gallo cornudo, que aleonado, choro y zorro, con
cara de pescado y pavo, perezoso pero con un ojo de águila, muy arranado se volvió mono al pillar a los tortolitos conejeros picados de la
araña, carroñando como faisán un pollito al velador ya achunchado.
Muy vaca el par de
gusanos cerdos, mueren pollo como yunta de bueyes, al irrumpir este en la jaula cual corralero toro salvaje, que sin dejar diuca parada donde salto la
liebre, permite que la víbora escape como viuda negra y abandone a su cordero
degollado pata de laucha. Así, el delfín perla casi pato, recupera su becerro de oro para
hincarle el diente cual lobo a su cabra de camarón y jaiba.
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